STEVE JOBS: ¿Qué harías si este fuera tu último día?

Cuando Steve Jobs conoció a su mujer, el estaba en la universidad dando una conferencia y se la presentaron y él sintió el impulso de invitarla a cenar, pero tenía una reunión de trabajo.

De camino al coche se hizo una pregunta: ¿Qué haría si esta fuera la última noche de mi vida?, así que volvió corriendo a la sala de actos, la encontró y desde entonces no se separaron.

Te has preguntado alguna vez qué diferencia hay entre dos personas que siendo de la misma época y partiendo de las mismas condiciones sociales, unas logran tener éxito en la vida (dinero, posesiones, pareja, trabajo, amor, etc.) y otros a pesar de trabajar mucho no lo consiguen nunca o en mucha menor escala…

La diferencia está en la Actitud, y esa actitud se basa en ser creativos, inteligentes, apasionados, etcétera, etcétera.

Steve Jobs era todo eso y más y esa pregunta que se hizo la noche que conoció a su mujer, la utilizaba a menudo para tomar grandes decisiones: ¿Qué haría si fuera la última noche de mi vida? O ¿Qué haría si este fuera el último día de mi vida?

“Sé que no me arrepentiría de fracasar; sé que de lo único que puedo arrepentirme es de no haberlo probado” Jeff Bezos (Fundador de Amazon)

Al igual que Jobs, Jeff Bezos es uno de los grandes hombres de este siglo XXI, por su inteligencia y creatividad y ambos han sabido salir de su Zona de Confort para conseguir sus metas, por difíciles o imposibles que parecieran. Para tener una existencia plena, es imprescindible correr riesgos calculados y hacerlo a menudo. Quien no se atreve nunca gana.

No hay ningún lugar menos seguro que la zona de seguridad.

Es posible que en estos momentos de tu vida, estés viendo el mundo con miedos y limitaciones, pero ¿te has planteado que quizás no sea así el mundo realmente, sino que el mundo no es así, sino como nosotros lo vemos?

¿Y qué podemos aprender nosotros de estos hombres exitosos?

Pues para resumir el tema, y para evitar esos miedos y limitaciones que nos mantienen en nuestra zona de confort, yo votaría por mejorar cada día, poco a poco. 

Es decir que si cada día: 

-Leemos una página más de ese libro.

-Amamos un poco más a las personas que nos rodean.

-Cocinamos un poco mejor.

-Estamos con nuestros hijos 15 min. mas.

-Pasamos con nuestra pareja 15 min. mas.

-Estamos con nuestros amigos un tiempo más.

-Márcate un reto más cada día.

-Corre un quilómetro más.

-Dedica y concéntrate en tu trabajo de oficina / almacén.

-Etcétera…

Todo eso hará que cuando acabe el mes, hayas conseguido con pocas cosas o pocos minutos ser mejor persona o profesional y en cambio tu esfuerzo habrá sido mínimo, pero los resultados se multiplicarán por 30 (días).

Creo sinceramente, que al igual que nuestro cerebro, nuestras capacidades y habilidades son muchas, lo que pasa es que no las hemos probado. Pongamos por ejemplo el de pescar, seguramente nunca has ido a pescar, y al igual si lo hicieras y practicaras serías un gran pescador, pero como nunca lo has hecho…

Pues con todo lo demás es igual, si no hemos utilizados nuestras habilidades (quizás porque nunca nos han hecho falta) o hemos desarrollado nuestro cerebro más allá de lo que ahora necesitamos, ¿cómo sabemos que no podemos dar más de sí?

Reflexiona sobre eso y a partir de mañana empieza a dar un poco más de ti, lo suficiente para que al acabar el mes seas una persona más exitosa y poco a poco puedas sentirte orgulloso/a de ti mismo, que al final de tu vida no tengas que arrepentirte de las cosas que no hiciste o probaste, que sea porque tu no quisiste.

¡Te deseo lo mejor!

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